Cabecera
"Al amanecer la claridad del sol que llegaba desde los angostos y altos ventanales los hizo despertar pesadamente permitiéndoles, por primera vez, distinguir los contornos donde se hallaban. Era esta una sala de unos 2 metros por 2 metros de muros de piedra amarillentos y corroídos por telarañas y musgos. A simple vista no se distinguía ninguna salida"...." (Fragmento de manuscito encontrado traspapelado...)